Sunday, September 21, 2008

Produce perlas en tu vida…

Las Perlas son productos del dolor; resultados de la entrada de una sustancia extraña o indeseable en el interior de la ostra, como un parásito o un grano de arena.
Las perlas son heridas y curadas!!
En la parte interna de la concha se encuentra una sustancia lustrosa llamada NÁCAR. Cuando un grano de arena penetra, las células del Nácar comienzan a trabajar y cubren el grano de arena con capas y más capas, para proteger el cuerpo indefenso de la Ostra.
Como resultado, una linda perla se va formando. Una Ostra que no fue herida, de algún modo, no produce perlas, pues las perlas son heridas cicatrizadas...
Te has sentido herido por el engaño y rechazo de alguien que tu en verdad amabas...?
Te has sentido herido por palabras crueles o duras de alguien?
Tus ideas ya fueron rechazadas o mal interpretadas?Ya sufriste los duros golpes del prejuicio?Ya recibiste el intercambio de la indiferencia?
"Entonces produce una perla"
Cubre tus heridas con varias capas de amor. Infelizmente, son pocas las personas que se interesan por hacer esto.
La mayoría aprende sólo a cultivar resentimientos, dejando las heridas abiertas, alimentándolas con varios tipos de sentimientos pequeños y pensando solo en lo que sucedió o en la persona que te dejo o lastimó y, por lo tanto, no permitiendo que cicatricen.
Así, en la practica, lo que vemos son muchas“Ostras Vacías”, no porque no hayan sido heridas, sino porque no saben perdonar, comprender, dejar el pasado atrás y transformar el dolor en amor.
Una sonrisa, una mirada, un gesto, en la mayoría de veces, habla mas que mil palabras…

¡YA ES HORA! ¡EMPIEZA A PRODUCIR PERLAS EN TU VIDA!

Friday, December 01, 2006

que son los valores?

¿Valores?, ¿Qué son los valores?...

Podrían ser cualidades, costumbres, mitos, pero lo que sí, es que cada quién como individuo elige los valores que quiere mostrar ante una sociedad que juzga; porque no mencionarlo, la falta de valores, pero; ¡Quién decide que es los que esta bien o está mal! pero ¿es alguien tan perfecto como para poder juzgar a los demás por sus actos y falta de valores, sin caer en los mismos errores?, creo que la respuesta a estas preguntas es que cada quien cree lo que quiere en la vida y para eso hay opciones.

Hay quienes se basan en los valores humanos, que sólo perseveran buscando la estabilidad y el reconocimiento ante una sociedad que no perdona y sólo tiene memoria para recalcarte tus errores sin ver tus aciertos, que no respeta tu libre albedrío , que sólo enjuicia, dice y trata de lo que esta bien o está mal, sin tomar en cuenta causas y efectos, los valores humanos fallan porque no hay nadie perfecto, ni esa persona en la que tanto confías porque como todo ser humano en algún momento deja todo por nada, falla y comete errores, por lo cual poco a poco va hacia la decadencia, al creer que no hay quien merezca tu ilusa perfección, pero los seres humanos también culpan al otro de sus errores, de su desequilibrio, siendo que el equilibrio es uno mismo; pero no, la sociedad solo juzga y pide cuentas.

Pero también hay quien cree en el valor espiritual, en el que hay un ser supremo que te guía y sabe que existe un destino, en el que hay miedos, pero en el que hay que recorrer los caminos solo con fe, en el que nuestro ser supremo olvida y perdona y respeta nuestro libre albedrío, que entiende nuestras necesidades de ser escuchados y de afecto, el que no modifica sus valores porque todos llevan a una meta. Ese ser supremo en el que se cree pregunta el ¿por qué?, no tiene juicios, tiene preguntas.

Así cada persona tiene los valores que demuestran realmente en sociedad y no de los que algunos se mofan pero en realidad carecen…

Wednesday, October 11, 2006


Se feliz

Cuenta la leyenda que un hombre oyó decir que la felicidad era un tesoro. Apartir de aquel instante comenzó a buscarla. Primero se aventuró por el placery por todo lo sensual, luego por el poder y la riqueza, después por la fama y lagloria, y así fue recorriendo el mundo del orgullo, del saber, de los viajes,del trabajo, del ocio y de todo cuanto estaba al alcance de su mano.En un recodo del camino vio un letrero que decía: "Le quedan dos meses de vida"Aquel hombre, cansado y desgastado por los sinsabores de la vida se dijo: "Estosdos meses los dedicaré a compartir todo lo que tengo de experiencia, de saber yde vida con las personas que me rodean."Y aquel buscador infatigable de la felicidad, sólo al final de sus días,encontró que en su interior, en lo que podía compartir, en el tiempo que lededicaba a los demás, en la renuncia que hacía de sí mismo por servir, estaba eltesoro que tanto había deseado.Comprendió que para ser feliz se necesita amar; aceptar la vida como viene;disfrutar de lo pequeño y de lo grande; conocerse a sí mismo y aceptarse asícomo se es; sentirse querido y valorado, pero también querer y valorar; tenerrazones para vivir y esperar y también razones para morir y descansar.Entendió que la felicidad brota en el corazón, con el rocío del cariño, laternura y la comprensión. Que son instantes y momentos de plenitud y bienestar;que está unida y ligada a la forma de ver a la gente y de relacionarse con ella;que siempre está de salida y que para tenerla hay que gozar de paz interior.Finalmente descubrió que cada edad tiene su propia medida de felicidad y quesólo Dios es la fuente suprema de la alegría, por ser ÉL: amor, bondad,reconciliación, perdón y donación total.Y en su mente recordó aquella sentencia que dice: "Cuánto gozamos con lo pocoque tenemos y cuánto sufrimos por lo mucho que anhelamos."Ser Feliz, es una actitud.

reflexiones para la vida

Eres el piloto de tu vida
“Cuando conduzco el coche, me molesta que quien está junto a mi, me diga que camino tomar, que me detenga o ¡cuidado! Yo soy el conductor. Yo se porque hago lo que hago. Y el conductor es el único que lo sabe. Nunca hago caso de quien quiere decirme como manejar, porque por eso pasan accidentes”.
Escuché que le respondía un hombre a su amiga, cuando esta le platicó que su hija conducía un coche, y le dijo que acelerara para evitar un trailer. Su hija le hizo caso, pero no alcanzó a pasarlo. El trailer se llevó el coche. Afortunadamente viven para contarlo.Como un rayo, comparé las similitudes que tiene este ejemplo con nuestra vida.
Nuestro coche se llama “vida” y el Ser Supremo ha sido lo suficientemente generoso, como para darnos a cada quien un “coche” propio.
Todos somos los conductores de nuestra propia vida. Desafortunadamente, muchos no asumen esa responsabilidad.
Son conductores miedosos, que les gusta preguntar a cuanto tripulante tienen, que deben hacer.
Y como resultado, tienen accidentes o no están satisfechos con su vida. ¿Por qué siguen escuchando los consejos de otros, cuando no están satisfecho con los resultados?
Simple. Es más fácil culpar a otros de sus fracasos, que ser responsables de sus decisiones.
Es el caso de la chica que le pregunta a la mamá ¿Qué debo estudiar?
O el caso del chico que pregunta ¿Cuál carrera da más dinero?
Porque el precio de seguir los impulsos de tu corazón, de tomar tus propias decisiones, es la posibilidad de fracasar.
Nadie puede esperar tener éxito en lo que le gusta con tan solo unos intentos. La historia está llena de hombres que estuvieron peleando por sus ideas, y que después de fracasos temporales, obtuvieron el éxito.
Aplicaron la persistencia en sus sueños.
La sensación de libertad, de asumir el control del volante de tu vida, te dará una seguridad y energía interior que no tiene precio.
Para un militar, su orgullo son las heridas de guerra. Y para el hombre de negocios, platicar de sus fracasos, antes de alcanzar la cima.
Aunque las derrotas temporales te causen dolor… cuando sean cosa del pasado, te divertirá recordarlas. Le dará más valor a tu éxito.
Detén a esa persona mata pasiones, y no la escuches cuando quiera dirigir el coche de tu vida, a una velocidad diferente a la que tú lo haces.
El no conoce porqué haces lo que haces. No conoce tu vida, como tú la conoces.
El no comprende tus sueños y motivos.
Finalmente, él en sus consejos, proyecta lo que él es. Lo que el hace. Lo que haría en tu lugar. Y si es un mediocre, y le haces caso… vas a acabar siendo un mediocre también.
Observa que las personas que han tenido éxito, primero se escuchan a sí mismas. Fueron tercas en escucharse primero a ellas mismas, antes que a los demás.
¿Que consejo te puedo dar? Hay dos frases que me encantan: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar” de Machado, y “Try hard enough” de Malcolm Forbes, esto es: sigue intentando hasta que tengas éxito.
Recordando mi vida, veo que las actividades en que he tenido más éxito, son en las que he aplicado estas dos frases. Y añade otro ingrediente: la esperanza.
En lo que más he tenido éxito, siempre hubo un momento en el que tuve un fracaso tan doloroso, que se abrían ante mi dos caminos: seguir adelante a pesar de que parecía que no lo lograría, o resignarme.
Al tomar el camino de seguir adelante… ¡lo logré! Te confieso que ya no creía en mi. Pero tenía la esperanza de lograrlo. Y la esperanza, transformó en realidad mis sueños.
También, hubo momentos en los que elegí el camino de la resignación. Me excusé ante mi mismo con mil pretextos de porque había fracasado. Pero no dejo de pensar que pude haber elegido la otra vereda y que pude haber tenido éxito.
La esperanza debes mezclarla con la persistencia también. Tu Breve Espacio, es fruto de la esperanza y persistencia combinadas.
La fe en un Ser Supremo también ha sido muy importante para mi. Me ha dado la paz y serenidad necesarias cuando parece que mi mundo se voltea de cabeza.
Te invito a que experimentes la emoción de conducir el coche de tu vida. Disfrútalo a tu ritmo, a tu manera ¡Y condúcelo hasta las estrellas!
¡Suerte!